Las articulaciones sinoviales surgieron antes de lo esperado y revolucionaron el movimiento vertebrado. Dos estudios revelan un esqueleto más antiguo y modular de lo que se creía.
Este tipo de lesiones se pueden producir por varios factores, entre los cuales se encuentran la falta de flexibilidad, la fatiga, la debilidad o desequilibrio muscular, así como otros conocidos como ‘no modificables’ como las roturas previas o la edad.